Un adiós no duele tanto … Duelen los recuerdos y las vivencias que quedan después, duele la nostalgia de tiempos pasados y sin retorno, duele incluso lo que no hicimos y podíamos haber hecho; pero nada de esto tiene remedio, porque el ciclo vital de las personas es como un reloj cuyos imparables punteros siempre dirigirán su movimiento hacia adelante.

Hoy ha fallecido mi tío Guillermo Panizo, el único que por vía materna me quedaba, y esos recuerdos, sobre todo los de mi niñez, coincidiendo con su etapa docente en El Hierro, permanecerán imborrables como aquellas letras con tinta azul de pluma estilográfica, en perfecta caligrafía y armonía que dejaron constancia de su actividad en muchas facetas de la vida: la de maestro de escuela, la de artista autodidacta y la de político, bueno mejor servidor público. 

No son horas para el lamento, pero sí lo son para los recuerdos, sobre todo para los buenos. No son momentos para reconocimientos que nunca llegaron en vida, pero sí para poner en valor por mi parte toda una trayectoria olvidada por esas brumas herreñas que no nos dejan ver en la distancia.

Hoy es un día para rememorar tiempos pasados, y recorrer mentalmente con aquellas rubias familiares Seat 1430, la de los Panizo Álamo de color blanco, y la de nosotros los Álamo Panizo, verde olivo, aquellas pistas de tierra que nos conducían, a ellos a La Caleta o a La Estaca, y a nosotros casi siempre a El Tamaduste, para darnos un refrescante baño.

Mi tío Guillermo Panizo, fue un hombre formado de los de aquel entonces, maestro de escuela, o como se les conocía un `maestro nacional´. Con familia numerosa, los Panizo Álamo, nosotros Álamo Panizo, ellos seis y nosotros cuatro, con una consanguinidad por las dos raíces genealógicas.

En su etapa como alcalde de Valverde se inauguró el aeropuerto (1972), se inició el proceso de alumbrado público de Valverde y sus pueblos, e incluso se inició el Plan General de Ordenación Urbana, y ya se hablaba del saneamiento de la Villa; incluso tuvimos la primer y única Mis España (1974) de la historia, Nelly, y El Hierro se dio a conocer. La Democracia que hoy conocemos y disfrutamos se la debemos en parte también a aquellos que en épocas predemocráticas trabajaron honradamente por y para la sociedad con recursos escasos, y nunca hicieron ostentación ni abuso de poder bajo el proteccionismo del régimen.

Así, que tío Guillermo, tú también formas parte de los logros del pasado y también de los del presente de El Hierro. Que sirvan estas fotos para recordar que para que haya un después tuvo que haber un antes, y que las mismas, y a modo de homenaje, conmemorar contigo y junto a ti tu partida.

Aún recuerdo nuestro último encuentro, después de superado el COVID que tanto obstáculo nos puso para vernos. En tu silla de ruedas, ya un poco ausente, me reconociste y tu hermetismo no te impidió aferrarte con fuerzas a mis manos, y yo a las tuyas; a llorar en una emoción contenida tras mucho tiempo si vernos, y a recordar algunos capítulos de nuestras vidas, aunque tu voz de maestro de la vida y de la escuela ya estuviera un poco apagada.

Hoy los Panizo Álamo, nuestra querida tía Nela, y toda su extensa familia, han perdido un gran hombre y padre. Nosotros, los Álamo Panizo, a un gran tío, al último, al hermano de nuestra añorada madre Maribel y tía Nena; al segundo hijo de nuestra segunda madre, nuestra abuela Marusa.

Siempre tendrás el mejor lugar en nuestra enciclopedia de los recuerdos. D.E.P.